martes, 20 de noviembre de 2012

Juli: La pequeña Roma de América

Hace unas semanas estuve en Puno. Por trabajo debía llegar hasta Ilave. En Puno había visto un folleto turístico que hablaba de Juli como "La Pequeña Roma de América". Estando en Ilave, Juli me resultaba muy cerca (poco menos de 30 minutos). Movido por la curiosidad, decidí visitar Juli.

Reconozco que al entrar a la ciudad de Juli me desencanté. Otra ciudad andina que ha perdido su esencia, en pro de la "modernidad". Realmente detesto a los arquitectos e ingenieros que han obviado los tradicionales techos andinos de dos aguas por los techos planos costeños.

A pesar de que Juli es una ciudad mucho más atractiva que Ilave y cuenta con vistas maravillosas del Lago Titicada, que se puede divisar desde casi cada punto de la ciudad; el Juli "moderno" no resulta especialmente atractivo. Al llegar a la Plaza de Armas encontré la Catedral de la ciudad. Lamentablemente, estaba cerrada. Desde la Plaza divise una iglesia en la parte superior del pueblo.

Estando allí, tenía que ir. Tras caminar unas 3 ó 4 cuadras, llegué al Templo de la Asunción. Salvo el arco de ingreso, arquitectónicamente no hay mucho que destacar. Cuando intenté ingresar, descubrí que había que pagar S/. 6. Habiendo viajado hasta Juli y caminado (en subida) hasta el templo, a regañadientes pagué. Al ingresar, quedé absolutamente impresionado. Una maravilla escondida. Pinturas coloniales que harían palidecer de envidia al más chauvinista cusqueño. Los maravillosos altorelieves en el Altar Mayor, por si solos pagan el viaje.


Pregunté a los encargados de la seguridad si había otra iglesia para visitar. Me mencionaron otra, en la parte baja de la ciudad, invisible desde la Plaza de Armas. Emocionado baje y la encontré. La Iglesia de San Juan de Letrán. Otra opulenta iglesia colonial, sumamente impresionante. Igualmente llena de suntuosas pinturas coloniales.



Además, Juli tiene la Catedral, a la que no pude ingresar. Y una cuarta iglesia prácticamente derruida. Quien disfrute del arte colonial (especialmente la pintura), no debería perderse este ciudad. Creo que tiene un enorme potencial turístico, que podría articularse con el Lago Titicaca, que le da un entorno maravilloso.

sábado, 3 de noviembre de 2012

10 buenos restaurantes en Cusco

Hace casi 12 años visité por primera vez la ciudad de Cusco. Me enamoré de su encanto colonial y su intensa vida cultural. Desde hace 5 años vivimos en ella con mi familia.

Aunque me gusta comer bien en locales agradables, no me puedo considerar un gourmet. Sin embargo, me animo a presentar una lista con mis locales favoritos en la ciudad.

1. Para comer helados, El Hada un pequeño pero encantador local lleno de sabor. Si se busca sabores distintos, exóticos, este es el lugar perfecto. A pesar de la complejidad de los helados, resultan igualmente seductores para niños de todas las edades. Lo que más me gusta son los barquillos artesanales, hechos al momento.

2. Para desayunar, el Real Mc Coy, un restaurante distinto, especializado en comida inglesa. La atención es cordial y el desayuno inglés es muy contundente y sabroso. A mi esposa e hijos también les encanta.

3. Para tomar un café y unos bocaditos, La Bondiet, en sus dos locales, de Plateros y Heladeros, uno puede disfrutar de un excelente café, muy buenos sándwichs,  además de tortas y bocaditos dulces y salados, todos ellos muy bien elaborados y presentados.

4. Para comprar pan, el Delimonasterio. Me resultaría casi imposible alojarme en el Hotel Monasterio, pero al menos puedo disfrutar de los excelentes panes y postres que preparan. El Delimonasterio es una pequeña panadería donde el hotel ofrece al público en general sus productos. Los precios son muy asequibles y el sabor esta garantizado.

5. El mejor choripan de Cusco uno lo encuentra en el Molinari&Hnos, si bien esta algo lejos del centro, en la Av. La Cultura, Urb. Magisterio; si uno quiere disfrutar de un excelente choripan o de variados sándwichs de embutidos artesanales, el Molinari es el lugar ideal. En un local pequeño, en un segundo piso, sin mayores pretensiones, uno encuentra los mejores sándwichs de Cusco.

6. Para una cena elegante, el Limo o El Incanto; ambos restaurantes son excelentes, con buena atención y comida muy sabrosa, los precios son ligeramente altos, sin llegar a ser abusivos.

7. Comida del oriente, El Bambú, ubicado en calle Procuradores, tiene una carta variada, sabores exóticos, todo ello a un precio razonable. Siempre volvemos por los rolls que son muy buenos y generosos en su ración.

8. Comida típica de Cusco, si bien hay muchos locales, el que frecuentamos con regularidad es el Don Luis, al final de la Av. Regional, casi en el cruce con la Av. Pardo. El chairo es imperdible, uno de los mejores de Cusco.

9. Comida norteña, de lo mejor El Paisa, en la Av. El Sol. Siempre hay antojos y, a pesar del entorno andino, uno quizás añora un buen ceviche o un arroz con pato, en El Paisa, podrá satisfacer el antojo con una muy buena sazón norteña.

10. Comida arequipeña, con distancia, El Characato, en la Av. Infancia. Es un restaurante nómada, desde que lo conocí, ha pasado por tres o cuatro locales distintos, felizmente sin perder el sabor. El adobo arequipeño es imperdible.