
Reconozco que al entrar a la ciudad de Juli me desencanté. Otra ciudad andina que ha perdido su esencia, en pro de la "modernidad". Realmente detesto a los arquitectos e ingenieros que han obviado los tradicionales techos andinos de dos aguas por los techos planos costeños.

Estando allí, tenía que ir. Tras caminar unas 3 ó 4 cuadras, llegué al Templo de la Asunción. Salvo el arco de ingreso, arquitectónicamente no hay mucho que destacar. Cuando intenté ingresar, descubrí que había que pagar S/. 6. Habiendo viajado hasta Juli y caminado (en subida) hasta el templo, a regañadientes pagué. Al ingresar, quedé absolutamente impresionado. Una maravilla escondida. Pinturas coloniales que harían palidecer de envidia al más chauvinista cusqueño. Los maravillosos altorelieves en el Altar Mayor, por si solos pagan el viaje.

Pregunté a los encargados de la seguridad si había otra iglesia para visitar. Me mencionaron otra, en la parte baja de la ciudad, invisible desde la Plaza de Armas. Emocionado baje y la encontré. La Iglesia de San Juan de Letrán. Otra opulenta iglesia colonial, sumamente impresionante. Igualmente llena de suntuosas pinturas coloniales.
Además, Juli tiene la Catedral, a la que no pude ingresar. Y una cuarta iglesia prácticamente derruida. Quien disfrute del arte colonial (especialmente la pintura), no debería perderse este ciudad. Creo que tiene un enorme potencial turístico, que podría articularse con el Lago Titicaca, que le da un entorno maravilloso.